En 1831 (y bajo circunstancias aún misteriosas) se produjo un importante hallazgo en la isla de Lewis (perteneciente al archipiélago de las Hébridas, al noroeste de Escocia). Se trataba de un conjunto de piezas de ajedrez de marfil que sorprenden de inmediato por la exquisita talla y expresividad de las