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Alcanzó la fama por su faceta más conocida, la de actriz, pero hoy se la reconoce también por otra que nada tiene que ver; la de ingeniera e inventora. Hedwig Eva Maria Kiesler, austríaca, hija de un banquero y una pianista judíos y de destacada inteligencia ya desde pequeña. Inició los estudios de ingeniería, pero los dejó para dedicarse a la interpretación.
En este campo se hizo famosa gracias a la película checo-austríaca Éxtasis (1933), pero no precisamente por su actuación, sino por dos cosas en las que también fue pionera: el primer desnudo en una película comercial y la primera representación de un orgasmo femenino en pantalla. Por este último motivo, la película fue condenada por el papa Pío XI y las Ligas de la Decencia. Con la cinta comenzaron sus problemas, aunque no por la mentada censura papal.
Un importante empresario del negocio de las armas, Friedrich Mandl, se fijó en ella a raíz de la película y llegó a un acuerdo con sus padres para casarse con Hedwig, aun contra su voluntad.
Este hombre era amigo personal de Hitler y Mussolini y un destacado fascista que hacía fortuna vendiéndoles armamento. Según sus propias memorias, en los cuatro años que duró el matrimonio la tuvo encerrada en casa y no podía ni siquiera bañarse sin que la vigilara. Intentó comprar —sin éxito— todas las copias existentes de su película para que nadie más la volviera a ver desnuda, y la forzaba a acompañarlo a cenas y reuniones de negocios. Ella, extremadamente inteligente, aprovechó para aprender sobre los negocios de su marido y la situación armamentística del periodo de entreguerras.
En 1937 contrató a una asistenta que se le parecía físicamente para poder escapar disfrazada de ella y llegar hasta París, desde donde se dirigió a Londres y conoció a Louis B. Mayer, de la Metro Goldwyn Mayer. Embarcó junto a él camino a Estados Unidos y consiguió convencerlo de que la contratara. Fue él quien cambió su nombre al apodo artístico por el que es conocida: Hedy Lamarr.
El Hollywood trabajó en un total de 35 películas junto a los grandes actores de la Edad de Oro y protagonizó títulos tan conocidos como Sansón y Dalila. Y mientras hacía carrera en el cine utilizó los conocimientos adquiridos durante su matrimonio para pasar información al gobierno estadounidense y para desarrollar junto al pianista y compositor George Antheil —que trabajó también como tal en Hollywood— aquello que necesitaban los clientes de su marido: el espectro ensanchado por saltos de frecuencia.
Antheil era americano y perteneciente a la Liga anti-Nazi de Hollywood. Lamarr, judía y fugada de un matrimonio horrible con un magnate nazi. El objetivo de su invento era evidente, puesto que corría el año 1942 y se encontraban inmersos en plena Segunda Guerra Mundial. ¿En qué consiste? Por simplificar, ya que no es nuestro campo y no somos tan listos como Hedy Lamarr, los distintos gobiernos temían utilizar misiles teledirigidos porque la señal podía interceptarse y ser usados en su contra. Con el invento de Lamarr y Antheil, la señal saltaba de frecuencia en frecuencia y con una duración muy corta, lo que la hacía difícil tanto de interceptar como de interpretar. Además, podía compartir ancho de banda con otras señales sin interferencias. Con ello podían programarse misiles teledirigidos con mayor seguridad.
A pesar de esto, la primera vez que se sabe que se puso en práctica no fue contra los nazis, sino en 1962 durante la crisis de los misiles de Cuba para controlar de forma remota las boyas rastreadoras marinas, y más tarde se usó también en la guerra de Vietnam y en la defensa por satélite durante la Guerra Fría. En los años 80 empezó a aplicarse fuera del campo militar y sirvió de base para desarrollar tecnologías como la que posiblemente estás utilizando para leer esto: el WIFI.
Si quieres utilizar este texto perteneciente a La Misma Historia, no olvides citarnos de la siguiente forma:
Elías Viana, Marta: Hedy Lamarr, estrella de Hollywood e ingeniera (7 de marzo de 2018), en La Misma Historia [Blog]. Recuperado en: https://lamismahistoria.es/hedy-lamarr/ [Consulta: fecha en que hayas accedido a esta entrada]
Es también escritora de novelas de ficción y co-fundadora y administradora de «Por la Grecia de Zeus».
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